31 mayo 2008
Rusia levanta la prohibición de donar sangre a homosexuales y prostitutas
El 'Gran Hermano' del virus del sida
La marcha del 'Orgullo Gay' en Riga reúne a más opositores que a partidarios
Cerca de 200 personas se congregaron hoy con motivo de la marcha del 'Orgullo gay' en el malecón de la capital de Letonia, Riga, a la que acudieron más opositores, cerca de mil, que defensores de las minorías sexuales.
Casi todos los participantes llevaban camisetas amarillas con el lema 'Act of Ecuality' (Acto de Igualdad) y la imagen de una vela con un alambre de espino enroscado, el símbolo de Amnistía Internacional, mientras algunos portaban banderas con los colores del arco iris.
Entre los participantes de la marcha, que finalizó tras aproximadamente una hora ante la iglesia anglicana, había muchos extranjeros, pero ningún representante de las autoridades, según la agencia Baltic News Service (BNS).
A pesar de los temores de las fuerzas de seguridad, cuyos efectivos también superaron en número a los participantes, el acto transcurrió sin incidentes violentos.
Detrás de las vallas de protección se congregó una multitud de adversarios, entre representantes de organizaciones religiosas y nacionalistas, que recibió a los participantes de la marcha al grito de 'No Pride!' (Ningún Orgullo) y con pancartas de condena a la homosexualidad.
Cuatro opositores y un manifestante fueron detenidos, los primeros por ofrecer resistencia a las fuerzas del orden y el segundo por romper la pancarta que portaba uno de los adversarios, informó Andris Dzenis, jefe de la policía regional.
Representantes de las iglesias católica, luterana y ortodoxa rusa han pedido en más de una ocasión a las autoridades letonas la prohibición de las marchas del 'Orgullo Gay'.
En la marcha celebrada el año pasado participaron alrededor de 500 de personas, incluido un centenar de visitantes extranjeros y varios eurodiputados liberales y de izquierdas que quisieron solidarizarse con la comunidad homosexual de ese país báltico.
La primera marcha del orgullo gay se celebró en Riga en 2005 y se vio marcada por una serie de ataques por parte de ultras homófobos, razón por la que la Asamblea Legislativa de la capital prohibió al año siguiente la segunda manifestación Rigas Pride-2006.
30 mayo 2008
Un tribunal turco ordena el cierre de una asociación gay
El ejército brasileño readmitirá a una sargento transexual
Le impidieron trabajar como sargento después de realizarse una cirugía de cambio de sexo.
La sargento Fabiane Barros Portela, estaba apartada temporalmente del ejército tras someterse a una cirugía de reasignación de sexo. La decisión del Ejército se basaba en el Código Internacional de Enfermedades, que trata el transexualismo como un trastorno mental.
Fabiane solicitaba poder trabajar de nuevo como militar y ahora, la jueza Renata Cid Volotao ha dictaminado a reintegración y que el ejército le pague su salario militar y a ofrecerle asistencia psicológica para dictaminar si su opción sexual es incompatible con el servicio militar.
En una de cada cuatro familias catalanas hay algún homosexual
Una empresa de telefonía ridiculiza a los gays para vender moviles
Nueva York reconocerá matrimonios gays de fuera de sus fronteras
29 mayo 2008
El Frente de Liberación Gay celebra la suspensión del concierto de Sizzla en la sala Bikini
Los conciertos previstos para el 27 de mayo en Madrid y 28 en Barcelona de Sizzla Kalonji han sido cancelados
Ante la prohibición de la manifestación del Orgullo en Rusia, Arcópoli se manifestara ante su embajada en Madrid
27 mayo 2008
Todo listo para que el mejor cine gay y lésbico internacional vuelva a Baleares
Seis dirigentes del PP firman una enmienda para el Congreso contra el aborto y el matrimonio gay
Una lesbiana logra adoptar pese al veto de un juez
La mujer se querelló contra el magistrado Ferrín Calamita por retrasar el trámite
El Juzgado de Primera Instancia número 9 de Murcia ha permitido a la mujer lesbiana que se querelló contra el juez Ferrín Calamita adoptar a la hija de su pareja. Vanesa de las Heras solicitó en mayo de 2006 la adopción de la niña que su esposa, Susana Meseguer, había tenido tres meses antes. La ley de matrimonios entre personas del mismo sexo acoge esta posibilidad, que se suele solucionar con un trámite rutinario en el Registro Civil.
Pero Vanesa y Susana toparon con el juez conservador Ferrín Calamita, gracias al cual el procedimiento se ha dilatado hasta ahora. El retraso le ha valido a Calamita una querella por parte de Vanesa. Como consecuencia, el Consejo General del Poder Judicial decidió suspender al juez, a quien ya habían expedientado en otra ocasión por haber hecho uso de “expresiones extravagantes” en un auto en el que denegó la custodia de dos hijas a una madre por la supuesta homosexualidad de ésta.
Madre apta para adoptar
El juez que ha sustituido a Calamita al frente del Juzgado de Primera Instancia número 9 de Murcia considera que Vanesa de las Heras, bióloga en un hospital de Murcia y casada con Susana Meseguer un año antes de que naciera la niña, reúne los “requisitos de capacidad” que establece el Código Civil. Según el juez, “la documentación aportada y los informes efectuados han acreditado que la relación personal existente entre adoptante y adoptando es la propia de la relación paterno filial”.
La pareja contrajo matrimonio un año antes de que naciera la niña. Gracias a la aprobación de la ley del matrimonio homosexual, juntas decidieron que querían tener un bebé, y aunque fue Susana quien la albergó en su vientre, desde el principio la niña fue hija de ambas, explica Susana Meseguer.
“Estamos muy contentas. Han sido dos años muy dolorosos para toda la familia, esta no fue una batalla sólo nuestra. Mi abuela y mi bisabuela estaban muy preocupadas. Nos sentimos totalmente desprotegidas, pero al fin hemos conseguido que se reconozca nuestro derecho”, explica Susana.
La pareja pronto podrá normalizar la situación de su hija. Entre otras cosas, las tres chicas podrán tener un único libro de familia. La imposibilidad de que Vanesa adoptara a la niña, hizo que el matrimonio tuviera un libro de familia y Susana tuviera que dar de alta otro para ella y la niña tras dar a luz. Susana explica que el juez Calamita incluso aseguró que ella no era capaz de decidir qué era lo mejor para su hija. “No tengo rencor”, asegura.
Susana explica que cuando Vanesa adopte a su hija, ésta estará más protegida. “Imagínate, si me llega a pasar algo a mi, qué hubiera sido de la niña”, razona Susana, que pone como ejemplo que Vanesa no pudo llevar al bebé a hacerle unos análisis porque legalmente no era familia del menor. “A todo tengo que ir yo”, explica.
Resuelto el escollo para que la justicia reconozca la familia que son, Vanesa y Susana esperan sin prisas que se ponga fecha al juicio derivado de la querella que interpusieron contra el juez Ferrín Calamita por haber retrasado “de forma maliciosa” su expediente de adopción.