04 marzo 2008

Consolidando conquistas

 

imagen BEATRIZ GIMENO

 

Respecto al tan traído y llevado derecho de los homosexuales a la ciudadanía de primera clase que el Parlamento (prácticamente todos los grupos parlamentarios menos el Partido Popular) nos otorgó al aprobar la posibilidad del matrimonio entre personas del mismo sexo, Eduardo Zaplana acaba de dejar claro, por si no lo estaba, que, si ganan las elecciones, van a cambiar dicha ley para llamarla de otra manera. Nosotros, a lo largo de nuestra lucha, ya dijimos en todos los foros en los que estuvimos presentes que no era sólo una cuestión de derechos, sino que se trataba de una cuestión de dignidad y de igualdad; ser iguales en ciudadanía, que de eso y no de otra cosa estábamos hablando. Por eso, siendo los derechos (económicos, patrimoniales, fiscales…) importantes, nosotros estábamos hablando de otra cosa.

Los populares no lo entendieron y siguen sin entenderlo. No pueden “descasar” a más de 3000 personas y… a las que vengan. Recuerdo que a mis abuelos, divorciados de sus primeras parejas y casados después por lo civil en la República, los “descasó” Franco y les hizo seguir casados –qué faena- hasta el fin de sus días con sus ex parejas. También Hitler deshizo los matrimonios entre judíos y quienes él llamaba arios. No pretendo comparar, -líbreme el cielo- al Partido Popular ni con Franco ni con Hitler, (aunque muchos franquistas sigan en ese partido) pero sí quiero decir que ningún sistema democrático puede revertir algo tan fundamental como el estado civil y los derechos que de él dimanan.

 
No se puede “descasar” a la gente a golpe de decreto, como no se la puede divorciar a la fuerza, ni se puede tampoco, porque a los señores del PP se les ponga en el moño, llamar al matrimonio, contraído con ese nombre, con su único nombre, de otra manera, porque lo que se llama distinto, es distinto y nos convertiría entonces en ciudadanos distintos.

 
Si en el PP no han entendido algo tan básico como que hay derechos que se conquistan y que no son reversibles, entonces en el 9 de marzo nos jugamos mucho más de lo que parece (¡y parece mucho!). Nos jugamos el peligroso regreso de un partido que parece que ya no conoce límites en el respeto a los consensos democráticos.

 
Cuando lesbianas, gays y transexuales conseguimos ser ciudadanos de primera, todos los españoles vimos nuestra libertad ampliada. Los derechos que se amplían y se conquistan son siempre conquistas y ampliación de derechos para toda la ciudadanía, que se hace así más libre, más plural, más democrática, más respetuosa de la diferencia.

 
El 9 de marzo nos jugamos mucho y por eso desde la FELGTB animamos a la ciudadanía a que vaya a las urnas y vote a la izquierda para defender y consolidar las conquistas que han hecho de este país un referente de la libertad, la justicia y la decencia.

 
Beatriz Gimeno es escritora y ex presidenta de la Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales (FELGTB)

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